Que gran reflexión Javi. Creo que muchos nos sentimos identificados. Yo con mis 42 tacos hace tiempo que me medio obligué a encontrar tiempo para mí y los míos, para disfrutar de tu tiempo, de no hacer maratones diarias de 12 horas trabajando. Y es verdad que cuando llegas a esta edad no tienes la misma energía que cuando tenías 30, pero seguimos luchando y tragando "mierda a paladas" a diario como bien dices :) y esto es posible porque crees en el propósito, en el porqué, de lo que estas construyendo.
Nunca se sabe cuando nos tocará "parar", por lo que hay que disfrutar el camino.
No quiero que parezca que frivolizo con el tema. Desde joven he tenido activo una especie de «garbage collector», un proceso que de vez en cuando saca de mi vida las cosas que uno hace que estorban y no aportan (y rescata cosas interesantes que parecían olvidadas). Pero aún así, hace no mucho tuve un punto de inflexión en pensar lo que estaba haciendo de mi vida cuando me di cuenta de que aunque me jubile mañana, ya no me dará la vida para leer todos los libros que tengo en casa (quizá los del montón de pendientes sí) ni volver a ver todas esas películas y series que he disfrutado en tiempos pasados. Eso me hizo sentir la escala real del tiempo que vivimos y me he asustado un poco, aunque lleve toda la vida con el rollo de «si te mueres mañana, ¿crees de verdad que has vivido la vida?».
Javi enhorabuena. Un post diferente y muy emotivo. En esta profesión la madurez llega muy pronto y lo descubres tan pronto te inunda la pereza infinita cada vez que te cuentan el enésimo framework de JavaScript o la supuesta nueva maravilla de plataforma low code. Por eso creo que la gente experimentada, con tiros daos como tú dices, es más necesaria que nunca. Esa pereza te centra en el valor aportado y no en el grado de molonidad que muestras. Hay que seguir. Pero entiendo el cansancio.
Muy muy reflejado en tu profunda declaración. En mi caso, 42 años ya, al volante de una pequeña empresa tech donde aunque no muevo tantos datos, y sin experiencias de vida como la tuya, los 40 me hicieron pensar igual, cuantas balas nos quedan y si lo que hacemos merece la pena, aunque nos guste, o si tendría que buscar dónde quemar las últimas balas en algo con más propósito… Gracias por compartir.
Muy sincero el post. Te diría desde la humildad que ser padre, ya lo sabrás, no es sencillo y el mío partió hace meses. También he calculado y considero el tiempo que me queda, aunque parezca algo absurdo, no lo es.
En cuanto a pasar datos de un lado para otro..., diría que es una forma muy bruta de decir lo que haces o aportas a los demás, lo importante es tener un propósito y que eso te llene en tu día a día. Seguro que aportas mucho a mucha gente de tu alrededor.
Excelente reflexión, Javi. No hay día que no se me pase por la cabeza algún pensamiento parecido. No es fácil encontrar la respuesta (yo aún no la tengo), pero no está solo. Un saludo.
Me siento muy identficado con lo que escribes. Desde hace tiempo priorizo mi tiempo y mi familia a mi carrera. Sigo pensando que aún puedo hacer cosas que marquen la diferencia en los próximos años, pero desde otra perspectiva.
Que post tan generoso. Abrise así en canal es, cuanto menos, valiente. Aquí una de 40 que va viendo que dejarse la piel en el trabajo, por mucho que te guste, a día de hoy no me renta. Los dólares son golosos pero estaré mayor, no te digo que no, pero ahora mismo tengo otras prioridades. Y no creo que sea malo. Digamos que mis balas van dirigidas a objetivos bien distintos a los de hace 10 años.
Bueno te comprendo, soy desarrollador de software, 57 años, tengo una pequeña empresa en Colombia. Mi padre también es paciente oncológico, actualmente no reporta c+ancer en ningúna parte de su cuerpo, pero esa enfermedad puede ser impredecible. Ya también empezaron mis problemas de salud. Lo bueno es que estoy disfrutando mi trabajo porque es un reto mental el desarrollo de software, es bueno para el cerebro. Pero ese disfrute es reciente, no siempre ha sido así.
Actualmente tengo dos colaboradores que me permiten concentrarme en aspectos ténicos y no en aspectos repetitivos que implican el brindar soporte a los clientes y también me permiten tener tiempo libre, gano menos pero disfruto un poco más de la vida.
Quiero seguir haciendo lo que hago hasta que no pueda hacerlo más, no se si será en un mes o en 30 años, sin embargo con la edad el pensamiento es más profundo, cosa que veo super interesante.
Que gran reflexión Javi. Creo que muchos nos sentimos identificados. Yo con mis 42 tacos hace tiempo que me medio obligué a encontrar tiempo para mí y los míos, para disfrutar de tu tiempo, de no hacer maratones diarias de 12 horas trabajando. Y es verdad que cuando llegas a esta edad no tienes la misma energía que cuando tenías 30, pero seguimos luchando y tragando "mierda a paladas" a diario como bien dices :) y esto es posible porque crees en el propósito, en el porqué, de lo que estas construyendo.
Nunca se sabe cuando nos tocará "parar", por lo que hay que disfrutar el camino.
Salud y p'alante!
No quiero que parezca que frivolizo con el tema. Desde joven he tenido activo una especie de «garbage collector», un proceso que de vez en cuando saca de mi vida las cosas que uno hace que estorban y no aportan (y rescata cosas interesantes que parecían olvidadas). Pero aún así, hace no mucho tuve un punto de inflexión en pensar lo que estaba haciendo de mi vida cuando me di cuenta de que aunque me jubile mañana, ya no me dará la vida para leer todos los libros que tengo en casa (quizá los del montón de pendientes sí) ni volver a ver todas esas películas y series que he disfrutado en tiempos pasados. Eso me hizo sentir la escala real del tiempo que vivimos y me he asustado un poco, aunque lleve toda la vida con el rollo de «si te mueres mañana, ¿crees de verdad que has vivido la vida?».
Javi enhorabuena. Un post diferente y muy emotivo. En esta profesión la madurez llega muy pronto y lo descubres tan pronto te inunda la pereza infinita cada vez que te cuentan el enésimo framework de JavaScript o la supuesta nueva maravilla de plataforma low code. Por eso creo que la gente experimentada, con tiros daos como tú dices, es más necesaria que nunca. Esa pereza te centra en el valor aportado y no en el grado de molonidad que muestras. Hay que seguir. Pero entiendo el cansancio.
Muy muy reflejado en tu profunda declaración. En mi caso, 42 años ya, al volante de una pequeña empresa tech donde aunque no muevo tantos datos, y sin experiencias de vida como la tuya, los 40 me hicieron pensar igual, cuantas balas nos quedan y si lo que hacemos merece la pena, aunque nos guste, o si tendría que buscar dónde quemar las últimas balas en algo con más propósito… Gracias por compartir.
Que encanto de post. Gracias por compartirlo :)
Muy sincero el post. Te diría desde la humildad que ser padre, ya lo sabrás, no es sencillo y el mío partió hace meses. También he calculado y considero el tiempo que me queda, aunque parezca algo absurdo, no lo es.
En cuanto a pasar datos de un lado para otro..., diría que es una forma muy bruta de decir lo que haces o aportas a los demás, lo importante es tener un propósito y que eso te llene en tu día a día. Seguro que aportas mucho a mucha gente de tu alrededor.
Un abrazo.
Excelente reflexión, Javi. No hay día que no se me pase por la cabeza algún pensamiento parecido. No es fácil encontrar la respuesta (yo aún no la tengo), pero no está solo. Un saludo.
Hola Javier,
Muy identificado.
No me puedo quejar de mis padres, pero, desde niño, intenté “huir” de ciertas cosas.
No bebo alcohol, me pareció un mal hábito.
Hace 9 años mi padre tuvo cáncer de colón, en un año le darán el alta, espero.
Desde entonces,… “esperando”…
Y a tope de curro aunque no sea “rico”, lo justo, bien, tampoco me quejo. Y me gusta.
También desde hace unos 8 años intento cuidarme todo lo que puedo, me cuido más, me formo menos,… e intento pasar más tiempo con los míos
Entiendo que es normal y que hay un tiempo para cada cosa
Un saludo y gracias por el artículo
Brutal Javi. No todo son ceros y unos. Lo has clavado, te lo dice un señoro de 55
Me siento muy identficado con lo que escribes. Desde hace tiempo priorizo mi tiempo y mi familia a mi carrera. Sigo pensando que aún puedo hacer cosas que marquen la diferencia en los próximos años, pero desde otra perspectiva.
Muchas gracias por la reflexión, Javi
Aquí un señor de 44 que te agradece el post y te manda un señor abrazo.
Que post tan generoso. Abrise así en canal es, cuanto menos, valiente. Aquí una de 40 que va viendo que dejarse la piel en el trabajo, por mucho que te guste, a día de hoy no me renta. Los dólares son golosos pero estaré mayor, no te digo que no, pero ahora mismo tengo otras prioridades. Y no creo que sea malo. Digamos que mis balas van dirigidas a objetivos bien distintos a los de hace 10 años.
Bueno te comprendo, soy desarrollador de software, 57 años, tengo una pequeña empresa en Colombia. Mi padre también es paciente oncológico, actualmente no reporta c+ancer en ningúna parte de su cuerpo, pero esa enfermedad puede ser impredecible. Ya también empezaron mis problemas de salud. Lo bueno es que estoy disfrutando mi trabajo porque es un reto mental el desarrollo de software, es bueno para el cerebro. Pero ese disfrute es reciente, no siempre ha sido así.
Actualmente tengo dos colaboradores que me permiten concentrarme en aspectos ténicos y no en aspectos repetitivos que implican el brindar soporte a los clientes y también me permiten tener tiempo libre, gano menos pero disfruto un poco más de la vida.
Quiero seguir haciendo lo que hago hasta que no pueda hacerlo más, no se si será en un mes o en 30 años, sin embargo con la edad el pensamiento es más profundo, cosa que veo super interesante.
Gracias por compartir tu experiencia.
Gracias por compartir. Palabras con mucho peso.